Mi gran experiencia por nueva york (increíble)

Volvemos a la atadura con las habilidades personales y frontales recorridos a Nueva York de amigos y seguidores de nuestro blog. En este riesgo, os traemos la de una gran amiga mía gallega, Henar Martínez, que hizo su trayecto a Nueva York hace ahora concretamente 6 años para retener britano americano, posteriormente volvió con una amiga para asemejarse viejos periodos y ya ha meditado residir a habitar una época en la capital. Gracias a una propina Icex, Henar puede aplicarse en la Embajada Española en Nueva York. Esperamos que os guste y que os sirva como narración para vuestros futuros delirios. Después de delirar a Nueva York por primera ocasión en Julio de 2010 y siendo benjamín de existencia en Eeuu (20 años), girar más tarde a advertir los rascacielos, el jaleo, las celebrities y sobre todo, recapacitar que seguía tal y como la dejé, me hizo explorar que Nueva York era el lado espléndido para existir al fuera de durante una fase larga. Por eso mismo eché las bandas Icex y escogí este hado para desarrollarme profesionalmente en la Embajada Española en Nueva York durante 12 meses. Como ahora he mencionado, la repetición no fui sola, mi amiga Ana me acompañó en este día a Nueva York.

Mi amiga y yo escogimos un Ymca que hay en 5 W 63rd St, principalmente porque nuestro Budget era limitado y porque la colocación es inmejorable. A cinco minutos de Central Park caminando y a quince de Times Square. La casa era limitada, de angarillas y el buceo era escoltado no obstante positivamente nos dio semejante porque todo estaba altamente noble y cuando viajas a una localidad como Nueva York, adonde únicamente usas el hotel para tumbarse, con tal de que haya limpieza el remanente no importa. Ya había estado en Nueva York a priori y a la vuelta de ese paseo decidí originarse a tacañear para retomar de nuevo. Cuando por tope reuní el oro, decidí armonizar en Diciembre para reparar la capital con la fulgora navideña. Nueva York siempre te sorprende, vayas en la época que vayas.



Algo con lo que siempre había fantaseado. Tenía en mente que Nueva York era la capital que en la vida dormía no obstante incluso que no estás en procedimiento de Times Square siendo deslizada por hordas de cualquieras, no eres positivamente consciente de lo viva que está la villa. Los rascacielos, las carreteras holganzas del Soho, Chinatown, Wall Street, Central Park…todos los barrios hacen que mires de un lugar a otro, sin saber altamente acertadamente a qué no sacarle fotografía. ¡es espeluznante! En un comienzo creía que iban a ser los rascacielos, no obstante una oportunidad superados, sin incertidumbre diría que Central Park. ¡puedes perderte en él un vencimiento entero que inclusive así no lo habrás advertido todo! Desde un enfoque conciliador, la cifra de sin ponedero que hay, impacta, no exclusivamente en el patrón pidiéndote humanidad sino todavía por la tierra, durmiendo dónde y cómo pueden. Es una localidad bastante dura para ellos, son invisibles, la gente ve lo que quiere observar. Otra cosa que no hay que desmemoriar es la broza, un jueves tarde puedes encontrarte cientos de carteras acumuladas que pueden bastar a graduar más de dos patrones. La limpieza en los límites de la divisoria deja mucho que enamorarse. Si vas a lo ahorrador el Century 21 en Wall Street, el outlet por eminencia en Manhattan puesto que ahí vais a otorgamiento localizar vestidura de cicatriz al mejor valor.

De hecho vivo aquí hoy en día. Trabajar en Nueva York es duro, no obstante merece la aflicción. No es lo mismo presentarse de recepción que resumir esta localidad en tu sitio de morada. El momento a plazo es complicado y te tienes que aclimatar. Además en la Embajada tenemos que rebatir a ricos reparos que van surgiendo a los castellanos que viajan a Nueva York. No obstante, os recomiendo a todos saludar, al aparte una sucesión en absoluto, esta población de antagonismos. Si tu barruntado es más alto, cualquier expendeduría de la Quinta ola o del Soho puede ser buena para ti. Si citas la capital en Navidad, un ‘must’ es salvar por adelante de Saks en la Quinta Avenida, la decoración frontal es simplemente increíble. En Nueva York hay dos guisas de deglutir, o admisiblemente o mal. Si te dejas vestir por la tajada escoria: Shake Shack es la mejor cadeneta de hamburguesas de la capital, las pizzas a 99c todavía son otra disyuntiva para los amantes de la pizza y no olvidarse de los puestos feriantes adonde te preparan un perrito incontinente o un falafel en 2 minutos. Si pesquisas zampar robusto, lo tienes más complicado porque aquí es más asequible el Mcmenú completo que la mezcolanza. Existen Dehli´s adonde gratificaciones por el peso de la manduca, y ahí ahora puedes optar que comes o no, sino siempre puedes averiguar mezclas y medianoches estudiados en cualquier autoservicio.

Contraté la New York city pass C3. Te da paso a tres “atracciones de la ciudad” y puedes regatear inclusive el 30% que yendo de costumbre unipersonal. Yo por ejemplo visité la Estatua de la Libertad, El top of the Rock y el Empire State, empero hay muchas cosas más entre las que separar. Y pero al final no lo hice, me quedé con ganas de asalariar en este blog la expedición para sobrevolar la city en helicóptero.